Acabó la fiesta pacense Almossassa 2024
Cada año, la ciudad de Badajoz revive su pasado con la celebración de Almossassa, un evento que conmemora su fundación árabe. La fiesta transforma el casco antiguo en un vibrante zoco lleno de puestos de comida, artesanía y actividades culturales que atraen a miles de personas. Aunque la participación en algunos aspectos de la festividad aún está creciendo, la riqueza de la oferta y el entusiasmo del público hacen que Almossassa sea una de las citas más esperadas del calendario festivo de la ciudad.
Celebración y ambiente en el Casco Antiguo
Este año, el zoco se instaló en la Plaza Alta y la Plaza de San José, donde más de un centenar de puestos ofrecieron productos de todo tipo. Los mercaderes llegaron de distintos puntos de España y del extranjero, generando un ambiente internacional que atraía la curiosidad de los asistentes. Algunos participantes, como Tarekh, decidieron volver a Badajoz en lugar de acudir a otras ciudades con mercados medievales coincidentes. «Aquí se celebra que los árabes fundaron Badajoz, lo que fomenta la convivencia entre culturas y religiones», comentaba, resaltando lo que hace a Almossassa especial en comparación con otras celebraciones.
Aunque algunos pacenses, como Paco y Noelia, se animaron a vestirse con atuendos árabes, la mayoría del público optó por un atuendo más cotidiano. La pareja había traído sus chilabas de un reciente viaje a Marrakech y esperaba que más personas se sumaran a la idea de vestirse para la ocasión. Sin embargo, Noelia señalaba que «aún hay poca gente vestida, pero lo importante es que cada año somos más».
El éxito del taller de turbantes
Uno de los grandes éxitos de este año fue el taller de turbantes en la calle Moreno Zancudo. Más de 120 personas participaron en este taller, donde aprendieron a colocarse el tradicional tocado oriental. Julián Monge, propietario de la tienda El Silencio, organizador del taller, reutilizó materiales de decoraciones anteriores para enseñar a los participantes cómo enrollar la tela alrededor de la cabeza con estilo y precisión.
Fátima Díaz, una de las participantes, acudió con sus hijas y destacó que Almossassa es su fiesta favorita. «Es la mejor fiesta de la ciudad, me encanta el ambiente, que se celebre el origen de Badajoz y los dulces árabes», comentaba. Este tipo de actividades, donde las personas pueden involucrarse de manera activa en la fiesta, están diseñadas para fomentar un sentimiento de pertenencia y reforzar la importancia histórica de la celebración.
El concejal de Ferias y Fiestas, José Antonio Casablancas, también se mostró satisfecho con la participación, aunque resaltó que todavía son pocos los que se animan a vestirse con ropa árabe, tal como se hacía en los orígenes de esta fiesta, que comenzó en 1998 y ha sido distinguida como Fiesta de Interés Regional. A pesar de esto, la afluencia de público continúa creciendo, y las actividades como los talleres de turbantes son un paso en la dirección correcta para fomentar mayor participación.
Gastronomía variada: tradición y modernidad
Almossassa no sería lo mismo sin su amplia oferta gastronómica, que combina platos tradicionales árabes con especialidades más contemporáneas. Entre los puestos más populares estuvo el que ofrecía cerdo asado, una de las grandes atracciones culinarias de la fiesta, donde el público se quedaba hipnotizado observando cómo giraba la carne sobre las brasas. Otros puestos destacaban por su jamón asado, con hasta 20 jamones preparados cada día, y las tradicionales salchichas alemanas, que se servían en las parrillas del Bocadillo Medieval.
Por supuesto, los sabores árabes también estuvieron presentes, con una variedad de dulces de miel y frutos secos que recordaban los sabores del norte de África y el sur de España. Estos dulces, espolvoreados con especias y preparados al estilo marroquí, no faltaron en los puestos de Almossassa. A pesar de la crisis económica, los pasteleros mantuvieron precios accesibles para todos, conscientes de que «la gente no quiere pagar más», como afirmaba uno de los comerciantes.
Actividades culturales: un viaje al pasado
El programa de actividades culturales es uno de los principales atractivos de Almossassa. La cetrería, un clásico de la fiesta, impresionó a los visitantes con su muestra de aves rapaces. El público tuvo la oportunidad de fotografiarse con especies como el águila de cola roja, una de las más impresionantes por su tamaño y majestuosidad.
Además, la agenda incluyó exhibiciones de alfarería y otros talleres infantiles que se llevaron a cabo en los jardines del Museo Arqueológico. Estos talleres ofrecieron a los más pequeños la oportunidad de aprender sobre la historia y la cultura a través de actividades manuales y recreativas.
En la tarde del sábado, los asistentes pudieron disfrutar de un concierto de la Banda Municipal, que alternó pasodobles con melodías orientales, añadiendo un toque especial a la atmósfera de la fiesta. Durante la noche, el pasacalles nocturno Danza de Luz ofreció un espectáculo mágico que iluminó el zoco, atrayendo a visitantes y locales por igual.
El cierre de Almossassa: Domingo con broche de oro
El domingo marca el final de Almossassa, pero no sin antes ofrecer un último día lleno de actividades para todos los públicos. Las visitas guiadas a la Alcazaba, como la ruta De los Marwanes a los almohades, fueron una de las actividades más destacadas, donde los participantes pudieron aprender sobre la historia de Badajoz a través de sus distintas etapas de construcción.
Además, se llevaron a cabo talleres de danza árabe en los Jardines de la Galera y sesiones de cuentacuentos, actividades pensadas tanto para adultos como para niños. A las 13:30, los asistentes pudieron disfrutar de un concierto de música árabe que cerró la fiesta con broche de oro, antes de que el mercado árabe cerrara oficialmente sus puertas a las 23:00 horas.
Almossassa no solo celebra la historia de Badajoz, sino que también fomenta la convivencia cultural, ofreciendo un espacio en el que todas las personas, tanto locales como visitantes, pueden disfrutar de un ambiente festivo único, lleno de actividades y experiencias inolvidables.